miércoles, 7 de abril de 2010

El camarote de "los tristes"

Dentro del barco, en el fondo-fondo, donde ni se llega a ver el horizonte del agua que hay, Marco tiene reservado un camarote para los que él llama "los tristes". Son esos que viven con cara de pena, miran con ojos de sombra y callan lágrimas del corazón.
Les ha dejado ese huequito porque sabe que cuando se siente gris la sangre, sólo cabe esperar.
El camarote sólo tiene un ojo, pero no hay muchas discusiones por eso, al fin y al cabo, lo único que parece interesarles a "los tristes" son sus zapatos.
Aunque claro que luego se les va pasando, cuando terminan de esperar y empiezan a no dejar pasar. Les entra eso que en otra vida llamaron curiosidad, descubren el pequeño círculo azul y recuerdan que había una cosa que se llamaba mar.